⚖️ Principios de la potestad sancionadora

La potestad sancionadora es una de las facultades que tienen las Administraciones Públicas para garantizar el cumplimiento de las normas y leyes. Esta potestad se encuentra regulada en la Ley del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas, y se basa en una serie de principios que deben ser respetados en todo momento.

¿Dónde se recogen los principios de la potestad sancionadora?

Los principios de la potestad sancionadora se recogen en la Constitución española y en la Ley del Procedimiento Administrativo Común de las Administraciones Públicas (LPACAP), que establece los procedimientos que se deben seguir para la imposición de sanciones.

¿Qué es el principio sancionador?

El principio sancionador es aquel que establece que solo se puede imponer una sanción en los casos expresamente previstos por la ley. Es decir, la Administración solo puede sancionar cuando existe una norma que lo permita.

¿Qué es una potestad sancionadora?

La potestad sancionadora es la facultad que tienen las Administraciones Públicas para imponer sanciones a los ciudadanos o empresas que incumplen la normativa vigente. Esta potestad es un mecanismo disuasorio que tiene como objetivo garantizar el cumplimiento de las normas y leyes.

¿Qué es el principio de legalidad en materia sancionadora?

El principio de legalidad es uno de los pilares fundamentales de la potestad sancionadora. Este principio establece que la Administración solo puede imponer sanciones cuando exista una norma que lo permita. Además, la sanción debe estar previamente establecida en la ley y no puede ser impuesta de forma arbitraria.

¿Cuándo se ejerce la potestad sancionadora?

La potestad sancionadora se ejerce cuando se produce un incumplimiento de la normativa vigente. Por ejemplo, cuando un ciudadano no paga una multa de tráfico, la Administración tiene la facultad de imponer una sanción.

¿Cuál es el principio de tipicidad?

El principio de tipicidad establece que la sanción debe estar previamente establecida en la ley y que debe ajustarse a los hechos que se están sancionando. Es decir, la Administración solo puede imponer una sanción por los hechos que estén expresamente previstos en la normativa.

¿Cuáles son las facultades sancionadoras?

Las facultades sancionadoras incluyen la potestad de iniciar un procedimiento sancionador, la potestad de imponer sanciones y la potestad de revisar y anular las sanciones impuestas. Además, la Administración tiene la facultad de realizar inspecciones y comprobaciones para detectar posibles incumplimientos de la normativa.

¿Quién inicia procedimiento sancionador?

La potestad sancionadora corresponde a la Administración Pública, por lo que es ella quien inicia y tramita el procedimiento sancionador. Sin embargo, el procedimiento puede iniciarse de oficio o a petición de parte interesada.

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